Siguiendo con nuestro homenaje al deporte nacional, presentamos a un hombre que cuando se habla de charros, el nombre de Rafael Velázquez, viene de inmediato a la mente de los expertos. En esta edición LXI del Congreso Estatal Charro -que se disputó a puerta cerrada y siguiendo todas las normas que la contingencia dicta- seha rendido un más que merecido homenaje a su trayectoria en el mundo de la Charrería y la enorme huella que ha dejado desde que nació la Asociación de Charros Ignacio León Ornelas, de la cual él es uno de los promotores de su fundación.
Siempre se destacó como un extraordinario jinete de toro y yegua, destreza que le mereció el formar parte del primer equipo representativo de la Asociación como jinete de toro, participando en la primera charreada inaugural, en septiembre de 1967. A 53 años de haberse conformado esta Asociación, ha sido testigo de su historia de la cual tiene muchas anécdotas para contar.
Sus amigos y familiares lo han descrito como un hombre sencillo y de buen corazón, que tiene por bandera la virtud de la humildad, transmitiendo este legado a sus hijos y nietos, con quienes ha disfrutado un sin número de competencias y juntos conforman ya la tercera generación de la familia Velázquez, en nuestro deporte por excelencia.
A Don Rafael, se le organizó una ceremonia en su segunda casa, el Lienzo Charro Ignacio León Ornelas, donde se le rindieron hermosas palabras para felicitarlo por todo lo que ha transmitido a sus amigos, a su familia y porque a sus 77 años todavía tiene mucho que inculcar a las siguientes generaciones. Además, le fueron entregados dos placas como reconocimientos y la Espuela de Oro, por parte de La Unión de Asociaciones de Charros del Estado de Guanajuato y el Consejo Directivo de la Federación Mexicana de Charrería A.C.
Homenaje y reconocimientos más que merecidos a Don Rafael Velázquez y, por ende, a toda su familia que le agradece el haberles inculcado esta cultura, esta disciplina, esta forma de vida llamada ‘charrería’ ¡¡¡Felices fiestas patrias!!!