En el Instituto Kipling, como ya es tradición, se llevó a cabo la tradicional misa con motivo de la celebración del 10 de mayo.
Más de cuatrocientas mamás, abuelitas y tías de los alumnos de kínder a preparatoria, participaron de este acto de fe, en el que también se recordó a las mamis ausentes, quienes desde el cielo continúan enviando bendiciones.
Pero la celebración no terminó ahí, porque también hubo un desayuno donde convivieron las mamis, quienes no sólo fueron atendidas por sus hijos, sino que también algunos de ellos, subieron al escenario a cantar, bailar o interpretar alguna melodía para ellas. ¡Muchas felicidades, mamis Kipling!