Quinta la Esperanza se convirtió en Bikini Bottom, para la fiesta por el quinto cumpleaños de Máxima Morán Arroyo, que sus papás Stephanie Arroyo y Sergio Morán, le regalaron.
Máxima se veía muy linda con su cosplay de Bob Esponja y su peluche de Gary, que no soltaba para nada; sus papás y su hermano Marcelo también fueron parte de la aventura acuática, disfrazados de Arenita, Don Cangrejo y Patricio.
La fiesta estuvo espectacular y tuvo de todo, con Spa y Estudio de belleza para las niñas, taller de pulseras, inflables, competencias, un carrusel, tiro al blanco, inflable con pelotas y mucho más. Y para los papás hubo cangreburgers y mixología.
Los niños se volvieron locos con la llegada de Bob Esponja y Patricio, pero eso no era todo, por la tarde, la gran sorpresa fue cuando Máxima cortó el listón de su Sweet Store, en la que les regaló a sus invitados productos temáticos de la caricatura.




